Mentes Desordenadas

Abrid la puerta y pasad. Estáis en un lugar donde podéis expresaros de una forma diferente. No hace falta que cobre lógica o tenga sentido, mis pensamientos se contradicen entre ellos librando constante batallas. Si deseas sentir, leer algo que no este carcomido por el interés o simplemente escuchar, da un paso y deja de razonarlo todo. Te invito a mi mundo desordenado, donde encontrarás pensamientos que perdiste bajo la cama de tu mente, sueños escondidos entre las páginas de algún libro y el impulso de una boca entreabierta, que aún no encontró su palabra. Bienvenido.

miércoles, 3 de agosto de 2016

Que a mí, no me interesa.

Que a mí no me interesa saber cuántas carreras tienes, ni cuantos idiomas sabes hablar, cuánto dinero tienes en el bolsillo, o de que marca es la camiseta que calzas.
A mí lo que me interesa saber, es si sabes escuchar, escuchar que no oír y si sabes observar el interior de las personas y no sus apariencias.
Si te hacen felices los amaneceres, o el olor a salitre, si eres capaz de plantarte en la playa y hablar con el mar.
Si disfrutas andando descalzo, para sentir realmente lo que hay debajo de tus pies, esa tierra a la que veces olvidamos y violamos.
A mí me interesa saber si eres capaz de pararte, y de encerrarte contigo mismo durante unos cuantos días, de recapacitar, de reflexionar en un mundo que nos invade como una ruleta rusa.
Si el sol en la cara te alegra, y si eres capaz de mirar hacia el cielo en una tarde lluviosa para sentir las gotas empotrándose contra tu cuerpo.
A mí me interesa saber si tienes fe, y no lo confundas con religión, fe en las personas, en los sentimientos, en la bondad, fe en este mundo.
Si eres capaz de encontrar belleza allá donde parece que no la hay, en un árbol en el rincón de la calle, en una flor que brota en mitad del cemento.
Que a mí no me importan tus zapatos, si no la piedra que guardas en ellos desde hace mucho tiempo y aun así, no te ha impedido caminar ni un solo día.
A mí me importa lo que eres por dentro, no lo que eres por fuera.

Me importa que te arranques la piel, que deshagas, que vuelvas, que ames, que llores, que cantes, que bailes y que te emociones. 

jueves, 18 de febrero de 2016

Yo no buscaba

Yo no buscaba en ti
un amor eterno,
ni que fueras el hombre de mi vida
ni compartir mis absurdos momentos
ni que solucionaras mis grises días.
Yo rompí mis esquemas hace mucho
dejando atrás, los sueños de princesa,
empezando con otros nuevos,
donde la niña bonita y dócil,
empuña la espada como una guerrera.

Yo no buscaba un te quiero,
ni cuatro estrofas mal puestas,
tan solo algunas noches de gozo,
unos abrazos sinceros,
un innegociable respeto,
a este envoltorio de huellas,
a este alma sin presupuesto,
sin precio de compra, ni venta.


jueves, 7 de enero de 2016

Dos tipos de personas

Existen dos tipos de personas en este mundo, los que rozan y los que tocan.
Aquellos que para llamar tu atención pasan por tu lado con un toque de chaqueta, y aquellos que te pellizcan hasta que sientas.
Los que caminan por la calle por inercia, o los que pisan los charcos a propósito.
Los valientes, los cobardes.
Los que viven viviendo, y los que viven amando y no, no hablo de pareja, amar es más que eso.  Amar es escuchar, abrazar, ayudar, amar es crear una risa espontanea, es hacerte presente en un momento, es que te sientan.
Existen solo dos tipos de personas en este mundo.
Aquellas que te hacen sentir especial seas quien seas, y aquellas que simplemente no te hacen sentir, así que elige bien, porque ninguna es eterna, y las dos es probable que te hagan daño en algún momento de tu vida, pero al menos elige un daño que valga la pena.
Por eso yo siempre he preferido un pellizco aun doloroso, a valientes sin cabeza, a las verdades que vienen de frente, a los locos que creen, que las personas es lo único que realmente importa.

Por eso, elige.