El día que cerré los ojos y supe
verte como nunca antes lo había hecho,
entendí hasta que punto podía llegar a quererte.
¡Y sucedió algo tan bonito!
Todo lo que me desquiciaba,
aquellos gestos, aquellas criticas, aquellas comparaciones, todo se evaporó en
un momento, dejando caer unas suaves plumas en la cama donde te miraba.
Comprendí que te había estado
observando y analizando erróneamente, que caemos en la ambiciosa tentación de
ver a la gente desde fuera para después, si a caso, descubrirla por dentro. Y
yo que te tenia cada mañana al levantarme, no supe darle la vuelta a aquella
absurda teoría, y comprender, que el pliegue que se forma en tus ojos, es solo
una huella de las veces que has sufrido y las veces que te has emocionado.
El día que entendí que todos
tenemos un pasado, y que tú no eres una excepción, que cada paso que damos en
la vida nos sirve para ser quienes somos,
que tu llevabas una vida caminando para ser quien eres ahora, y que estabas
dispuesta a despegar tus talones y a florecer de puntillas, ese día vi el poder
que yace en tu corazón y que puede conseguir milagros.
Me di cuenta de lo especial que
eres, y de lo especial que somos, que somos un maravilloso cumulo de errores,
que somos un trocito de plastilina en las manos de un niño, en el que se pueden
moldear sueños e ilusiones.
He comprendido, como debo
quererte, he comprendido que mas allá de cada critica que te haga en esos días en
los que el mundo se me echa encima y me atosiga, tu eres especial, que debo
respetarte y aceptarte, y no desde el punto etéreo en el que se sueña con que
las cosas cambien, si no en el que creo,
que tu eres esa estrella que puede alumbrar con su sonrisa a todas las que están
a tu alrededor.
Ojala hubiera ocurrido antes, y
ojala no vuelva a caer nunca en los reproches absurdos, las conciencias de insomnio,
y las criticas implacables, solo pido eso, para poder quererte de la forma tan
especial en que lo hago ahora.
El día que abrí los ojos y te vi
en el espejo, supe que el verdadero amor, está en uno mismo.
P.D . Quiérete siempre.